Mausoleo de Abu Bakr al Qaffal al Shashi
El mausoleo de Abu Bakr al Qaffal al Shashi (Abu Bakar al-Qaffal asy-Syasyi), uno de los monumentos culturales y arquitectónicos más importantes de Tashkent, es parte del complejo histórico y arquitectónico Hazrat Imán, que se encuentra en el distrito antiguo de la ciudad.
Históricamente, el conjunto arquitectónico de Hazrat Imán debe su origen al mausoleo de Abu Bakr al Qaffal al Shashi alrededor del cual se comenzaron a erigir nuevos edificios, que durante varios siglos formaron todo este complejo. La plaza y el conjunto arquitectónico recibieron el nombre de Hazrat Imán ("Santo Imán") en honor al famoso imán, experto en el Corán, erudito y predicador Abu Bakr al Qaffal al Shashi. Él fue un gran científico y teólogo que nació en Tashkent en 903 en la familia de un artesano o Qaffal (maestro creador de bellas cerraduras). El niño recibió su nombre en honor al profeta Mahoma y al primer califa, Abu Bakr. Su excelente educación proviene de estudiar en las madrasas de Tashkent, y luego de Bujará, Termez y Samarcanda. Abu Bakr fue considerado el discípulo y heredero espiritual de los famosos teólogos y eruditos musulmanes, Imán Al-Bujari y Muhammad Al-Termezi. Abu Bakr al Qaffal al Shashi, era un profundo devoto de la religión musulmana, más de una vez hizo el Hajj (peregrinación) a La Meca, viajó a las ciudades más grandes del mundo musulmán, reuniéndose y debatiendo con los eruditos musulmanes más destacados de la época. Su conocimiento de la teología era tan grande, y su autoridad era tan indiscutible que en el mundo árabe Abu Bakr fue llamado el Gran Imán. Muchos de sus contemporáneos incluso pensaban que en Transoxiana no había eruditos o científicos comparables al Gran Imán. Con muchos epítetos y títulos honoríficos, permaneció en la memoria de sus contemporáneos, principalmente como " Tashkentés" o "al Qaffal al Shashi" que significa "el cerrajero de Tashkent". Por cierto, cuenta la leyenda que recibió el apodo de "al Qaffal" o "cerrajero" por hacer una cerradura sorprendentemente hermosa, cuya llave pesaba más de un kilogramo.
Al igual que muchas de las personas ilustradas del pasado, Abu Bakr al Qaffal al Shashi no solo era un teólogo. Se sabe que fue un talentoso poeta y pensador. Solo una parte de las obras creadas por él ha logrado permanecer hasta nuestros días. Principalmente se dedicó a la filosofía y a la jurisprudencia de acuerdo con las enseñanzas de ash-Shafi`i, pero algunas de sus obras se dedicaron a la elocuencia y la poesía, su obra "La belleza de la dialéctica" se volvió famosa.
Abu Bakr al Qaffal al Shashi dedicó su vida a la difusión del Islam y la educación religiosa. Es por eso que en 976 después de su muerte, el lugar donde fue sepultado (en el jardín suburbano Bogi-Kaykaus, cerca de la muralla de la fortaleza de Tashkent) se convirtió en sagrado. El edificio del primer mausoleo de Abu Bakr al Qaffal al Shashi, construido en el siglo X, no sobrevivió. En su lugar a mediados del siglo XVI se construyó un nuevo mausoleo, que se ha conservado hasta nuestros días. Mirando cuidadosamente la fachada principal, puede verse los nombres de los arquitectos que participaron en la construcción, así como su fecha.
El mausoleo de Abu Bakr al Qaffal al Shashi se construyó en forma de un khanqah, un estilo arquitectónico inusual para los mausoleos. Inicialmente, los khanqahs se construyeron como refugios para derviches y viajeros. En esto se parecen a los monasterios cristianos, pero en un khanqah, a diferencia de lo que ocurre en un monasterio, era fácil entrar y salir.
La tumba de Abu Bakr al Qaffal al Shashi se convirtió en un lugar de peregrinación para los musulmanes, por lo que el mausoleo se construyó como un khanqah. Tiene una forma cuadrangular y un diseño asimétrico. Además, se encuentra en una plataforma alta, elevando el edificio del mausoleo por encima del resto de las construcciones. A pesar de su enormidad, el mausoleo de Abu Bakr al Qaffal al Shashi parece esbelto alzándose hacia el cielo no solo debido a la elevada plataforma, sino también debido a la cúpula que lo corona. Curiosamente, el portal de entrada está orientado hacia el norte, y no hacia La Meca, como la mayoría de los mausoleos. Además de la gran sala cruciforme, el edificio del mausoleo incluye tres niveles de celdas (hudjras) para peregrinos ubicados en los pilones de las esquinas.
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