Complejo Bahouddin Naqshbandi

A 12 kilómetros de Bujará se encuentra el complejo conmemorativo del santo Bahouddin Naqshbandi (siglo XVI), el famoso filósofo y sufí de Oriente. Este complejo conmemorativo es un santuario musulmán, que se ha convertido en un importante lugar de peregrinación,no solo para los habitantes de Bujará. Aquí vienen peregrinos de todo el mundo musulmán. Una vez en este lugar se encontraba el pueblo de Kasri Arifon, famoso por sus festivales paganos y sus antiguas tradiciones.

Bahouddin Naqshbandi (1318 - 1389) fundó una  Orden, que más tarde pasaría a llamarse como él. Las enseñanzas del gran Sufí se convirtieron en la estrella guía para un gran número de prominentes personalidades orientales de esa época. Y hoy, su filosofía no deja de ser relevante, atrayendo a muchos peregrinos de diferentes edades de todos los rincones de la tierra. La filosofía a la  que Naqshbandi adhirió toda su vida es bastante simple y puede expresarse en una sola frase: "Dilba yoru dast ba kop" - "el corazón con Dios y las manos en el trabajo". El símbolo de la orden se eligió de acuerdo con este postulado y está representado por un corazón con la palabra "Alá" dentro. Bahouddin Naqshbandi fue el mentor espiritual del gran Tamerlán y le enseñó, como a otras personas, a ser humilde y respetable. El sufí realizó el Hajj 32 veces a la Meca, y hoy su mausoleo es reconocido por la Meca de Asia Central. Se cree que si caminas desde Bujará tres veces a pie hasta el Mausoleo Naqshbandi, esto sería equivalente a un Hajj. Los creyentes de muchos países musulmanes se reúnen aquí para expiar sus pecados y pedir el cumplimiento de sus deseos, porque Alá responde a las oraciones en este lugar santo más rápido.

En 1389, Bahouddin Naqshbandi murió, y en 1544 Abdulaziz Khan ordenó construir una cripta para su tumba y los edificios circundantes. El complejo memorial fue construido durante casi cuatro siglos. En el centro del edificio había un patio rectangular con el sepulcro del jeque y una mezquita construidos en el siglo XIX. Un poco más lejos estaba el iwan en las columnas de madera donde se encontraba el sepulcro de los Shaybánidas. El khanqah de Abdulaziz Khan es el edificio con cúpula más grande allí. En los años 80 del siglo XX, se restauró todo el complejo, y hoy se puede ver un patio con un Hauz, las mezquitas de Muzaffar Khan y Kushbegi, las madrasas, la dakhma, un minarete y el sepulcro. Dentro de la tumba se posa una  antigua morera. Cuenta la leyenda que creció del bastón de Naqshbandi, y si se pide un deseo, gateando debajo de ella, este se hará realidad.

El complejo tiene un museo donde se puede encontrar información fidedigna sobre Bahouddin Naqshbandi y en general sobre el Sufismo. Aquí puede encontrarse ropa sufí, libros, calderos donde se preparaba la comida y muchos otros objetos interesantes en exhibición.

Todos los que han visitado este asombroso lugar hablan de su serenidad y armonía, que les llega hasta el alma.

Fotos:

ver todas las fotos »»

© Este material pertenece a la compaňía «Central Asia Travel».
Pueden copiar y usar este material sólo con permiso del autor.